La aeronave vuela hacia la persona que corre peligro de ahogarse y le entrega un chaleco salvavidas.
“Como parte del equipo de salvavidas en la playa de Sagunto (España), un dron estaba listo y a la espera cuando uno de los socorristas dio la alarma de que había personas atrapadas en una corriente y parecía que necesitaban ayuda”.
Así comienza la revista ‘sUAS News’, especializada en vehículos aéreos no tripulados, el relato del rescate de tres bañistas este verano en un área conocida por sus corrientes, un factor de peligro frente al cual es fundamental el tiempo de respuesta.
En la tarde del 15 de agosto, varios bañistas que estaban a unos 70 metros de la orilla se dieron cuenta de que estaban en medio de una corriente que rápidamente los arrastró mar adentro.
Momentos dramáticos
Al oír la alarma, el piloto del dron desplegó el pequeño vehículo rojo. Gracias a las instrucciones que el socorrista le dio por radio, ubicó las personas en apuros y evaluó la situación, en menos de un minuto, con la ayuda del video que tomaba y le transmitía la aeronave, denominada Auxdron Lifeguard (AL).
Cuando el dron se acercó, el piloto pudo ver que los bañistas estaban en peligro, sobre todo una mujer que estaba siendo ayudada por los otros miembros del grupo, y entonces decidió bajarle un dispositivo de flotación, según ‘sUAS News’.
El chaleco salvavidas, entregado mediante una cuerda de anclaje, se infló al contacto con el agua y se desconectó de la aeronave. La víctima se lo puso mientras el piloto notaba en su pantalla el alivio de la mujer. Poco después, dos socorristas llegaron en una moto acuática y ayudaron a los bañistas. La mujer fue llevada a la playa, donde la policía abrió espacio. Los médicos estaban en camino.
Según su creador, la firma General Drones (GD), este dron para salvamento y rescates en medios acuáticos transporta de forma rápida uno o dos chalecos autoinflables, alojados en compartimientos de carga.
El vehículo, de fibra de carbono, tiene una longitud diagonal entre motores de 83,5 centímetros y un peso máximo en el despegue de 9,95 kilogramos. Puede volar a 90 kilómetros por hora y operar en un radio de 3 kilómetros con una autonomía máxima de entre 26 y 34 minutos, según vuele con carga o no, informa GD.
La principal misión de este ‘guardián de la bahía’, que dispone de sistemas de vuelo inteligentes y lleva una cámara con dispositivos de estabilización y transmisión HD, es “reducir los tiempos de espera para quienes están en apuros en el agua”, informa el ingeniero industrial Adrián Plazas, director ejecutivo (CEO) de GD y fundador de la compañía junto con Enrique Fernández, especialista en el desarrollo de UAV (vehículos aéreos no tripulados), que oficia como director técnico.
“Esta aeronave reduce drásticamente el tiempo de respuesta en una primera intervención”, enfatiza Plazas, experto en salvamento y socorrismo.
Plazas explica que el Auxdron Lifeguard comienza a operar cuando un socorrista o un bañista comunica que una persona requiere ayuda, y el coordinador autoriza la actuación del dron. “A partir de ahí, el socorrista guiará la aeronave hasta la zona de conflicto”, señala.
Si la víctima está consciente, el AL soltará el flotador, que se infla automáticamente para mantenerla a flote hasta que los equipos de rescate acudan a recogerla. Si está inconsciente, guiará de forma rápida los equipos de salvamento hasta el lugar de la emergencia.
El chaleco salvavidas permanece unido a la aeronave hasta que el piloto lo entrega. Una vez asegurado, se realiza el desanclado del dron, que permanecerá en vuelo estacionario hasta la llegada de los servicios de salvamento y socorrismo.
Según Plazas, su aparato está preparado para soportar las condiciones climatológicas más adversas que se pueden dar en estos casos, como tormentas con lluvia intensa y vientos de hasta 46,3 kilómetros por hora.
“Esto es posible gracias a su construcción robusta e impermeable y a su sistema de propulsión X8 coaxial, específicamente desarrollado para proporcionar máxima potencia y fiabilidad en las situaciones más difíciles”, subraya.
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Producto ‘de exportación’
“El año pasado comenzamos a operar en Sagunto, Valencia, y pudimos comprobar que, efectivamente, es una herramienta que refuerza positivamente los equipos de salvamento en playas”, sostiene Plazas.
General Drones participó en un estudio sobre la mejora que puede suponer el despliegue de drones de rescate en las playas, junto con el Grupo de Investigación en Actividades Acuáticas y Socorrismo de la Universidad de La Coruña y técnicos del servicio de socorrismo del ayuntamiento de Sagunto.
Pudimos comprobar que, efectivamente, es una herramienta que refuerza positivamente los equipos de salvamento en playas
“Este año, el servicio de drones de vigilancia ha sido la novedad en la playa de Muro, de la isla de Mallorca y, por segundo año consecutivo, en Sagunto, donde el pasado 15 de agosto rescataron a dos grupos de bañistas”, apunta el ingeniero.
Plazas adelanta que en el futuro, este dron podría participar en labores de rescate en altamar, monitoreando la zona, enviando imágenes en tiempo real a un puesto de mando avanzado, ubicando a las víctimas de un naufragio o a quienes hayan caído desde un barco, y facilitándoles la flotabilidad.
“Este vehículo también podría operar en ríos, volando hacia una persona que haya sido arrastrada por la corriente y acercándose lo más posible a ella para entregarle el chaleco, ofreciendo una imagen de video que ayude a saber dónde se ubica la víctima y guiando los equipos de salvamento”, concluye.
Referente:https://www.eltiempo.com/tecnosfera/novedades-tecnologia/drones-para-salvamento-y-rescates-acuaticos-275040
